Semillitas de consciencia a alumnos de TAFAD de Sevilla
Gracias a su profesor Fran que, con su propuesta, ha abierto la puerta a sus alumnos, no sólo a valorar la información y los datos que normalmente se estudian en nutrición deportiva, sino también, a tener en cuenta la visión que se tiene desde oriente sobre la bioenergética del alimento.
La propuesta de ofrecer una charla sobre esa visión milenaria del alimento tan desconocida en occidente, a esta nueva generación que viene con tanta fuerza, ha sido un verdadero regalo. Y lo mejor de todo, es que no se quedará sólo aquí, ¡continuaremos en Septiembre!
Tengo que reconocer que me sorprendió mucho el interés de los alumnos sobre el tema, y las preguntas que realizaron.
El tiempo era limitado por lo que no pude profundizar en el tema, pero sí hubo posibilidad de dejar claros al menos unos conceptos básicos.
Sería imposible transcribir la charla y las preguntas completas, pero sí voy a nombrar lo que estuvimos viendo y sobre lo que debatimos:
- Alimentación mecánica Vs Alimentación Consciente
Este tema puede ser tan amplio como queramos, sobre todo porque dentro de la alimentación consciente hay una clasificación de 7 niveles de consciencia (según Osawa). Nosotros hemos enfocado el tema entre la diferencia de comer para sobrevivir y calmar el hambre, o comer para nutrir con la mejor calidad nuestra sangre y transitar el camino de la excelencia.
- Calidad de alimento = calidad de sangre = calidad de pensamientos = calidad de actos
Cuando entiendes que la calidad de lo que comes afecta directamente a todas tus células, así como a todos tus órganos y sus funciones, puedes ver claramente la relación entre la alimentación y la calidad de tus pensamientos (función de nuestro cerebro).
- La visión de nuestro cuerpo como una empresa
Si vemos nuestro cuerpo como si fuera una empresa, nunca elegirías ningún alimento que te desvitalice y te “robe energía”; al contrario, te cuidarás en seleccionar los alimentos que más vitalidad te aporten.
Todo lo que ingresa a nuestro cuerpo debe ser para sumarnos y no para restarnos, ya que si una empresa tiene más pérdidas que ganancias, ésta está destinada a la ruina (en caso de nuestro cuerpo, a la enfermedad). Por ello es tan importante elegir alimentos vivos y llenos de vitalidad. Esa energía que posee el alimento nos será transferida a nosotros.
- Las dietas no sirven
Las dietas tienen un principio y un final. Sólo en situaciones puntuales como exploraciones médicas y/o intervenciones el uso de una dieta puede ser útil. Pero si lo que buscas es mantener una buena salud y poseer gran energía vital, el cambio que aparezca en tu vida tiene que llegar para quedarse. Nuestra tarea es incluir nuevos hábitos alimenticios e integrarlos como parte de nuestra rutina diaria.
- No existe una alimentación para todos
La alimentación es un traje a medida que sólo queda bien para quien ha sido creado. La tarea de cada uno de nosotros es descubrir cuál es la alimentación que nos viene bien y construir nuestro propio traje a medidas.
Cada organismo es un mundo, cada metabolismo funciona de una manera, las condiciones de salud, el modo de vida y las circunstancias que nos rodean son distintas, y nuestra alimentación debe tener en cuenta todas estas variables para construir ese traje a medidas con éxito.
- Alimentación por dogmas
Si nos alimentamos según las últimas tendencias, las dietas de modas o diferentes tipos de alimentación que ponderan las creencias por encima de cualquier otro aspecto, nunca seremos libres de elegir.
Porque sólo es libre de elegir quien escucha su cuerpo y atiende esa llamada, aunque en ese momento vaya contra su creencia actual.
¿De verdad vamos a cuestionar el lenguaje y funcionamiento de esta impresionante, sofisticada y perfectísima máquina humana? ¿Tan poderosos y sabios nos creemos para cuestionar la inteligencia que hay tras nuestra naturaleza?
Entre todos estos temas hubo espacio para preguntas muy interesantes a cerca de “los cinco venenos blancos”, el agua de mar, el ayuno y las depuraciones, etc.
Para concluir comparto una reflexión tras la charla con los alumnos:
Creo firmemente en que nuestras experiencias de vida junto con los aprendizajes que éstas nos dejan, más los conocimientos que hemos adquirido a través de formaciones, cursos, intercambios de experiencias, libros, investigaciones, y un largo capítulo de “ensayo error” en nuestro caminar, están destinadas a ser compartidas con los demás. Más aún cuando el asunto está relacionado con la autogestión de la salud, la autorresponsabilidad y el autogobierno; entonces la llamada a dejar nuestro legado a los que vienen es indefectible.